CON PADRES ASÍ...

El pasado martes en el consejo escolar del CEIP Carmen de Burgos, del que soy miembro en representación del Área de Cultura del Ayuntamiento, en uno de los puntos a debatir del día, el representante del profesorado expuso un hecho para el que por desgracia, hoy por hoy, con la legislación vigente, a la clase docente tan sólo le queda el derecho al pataleo. Un hecho que desconocía y que sinceramente me dejó perplejo. Les cuento.
Desconocía, pues ni soy padre, ni tengo amigos con hijos en edad aún de obligatoria escolaridad, y tan sólo llevo poco más de un mes relacionándome con la educación pública de mi Andalucía, que los padres de nuestros pobres niños pueden tranquilamente llevar a sus hijos a clase cuando les salga de la entrepierna, pasándose literalmente por el arco del triunfo al profesor o profesora de turno de sus vástagos, e importándoles una puñetera higa el ejemplo que le dan a su progenie. Y lo más irritante del asunto es que cuentan con el amparo de la ley.Poco más o menos como si el colegio pues fuese un jardín de infancia para unos críos que ya empiezan a tener uso de razón, que usan para darse perfecta cuenta de la conducta vergonzante de sus padres, escuela paterna nefasta para el desarrollo personal de estas criaturas.
Dónde queda el ejemplo que deben dar padres y madres, que deben ser siempre la primera referencia de sus hijos, por encima del profesorado? Están los padres de hoy preparados para asumir la responsabilidad de serlo? Con esta actitud, podemos seguir extrañándonos de que la autoridad de los maestros cada vez esté más deteriorada? Puede seguir sorprendiéndonos que la adolescencia cada día tenga un comportamiento menos respetuoso para con sus mayores, sean éstos padres, profesores o demás miembros de entorno adulto?
No debe olvidarse nunca que la educación de los hijos es una responsabilidad en primera instancia de sus padres y que los profesores apoyarán y completarán, y debe quedar meridianamente claro que el colegio está para enseñar, verbo que entre sus acepciones podemos encontrar como sinónimo la palabra culturizar, y no para realizar una tarea para la que no se ha preparado el profesorado especificamente, ya que su obligación es enseñar al alumnado, no educarlo. Al colegio se debe ir educado de casa, y esto es algo que por desgracia no tiene muy claro un importante número de padres y madres, no sólo de Andalucia, sino de toda España, por desgracia. Sin educación, no puede haber enseñanza. Ya les digo, con padres así, nos sobran los colegios...

MALAGA, TIERRA DE MI PRIMER LLANTO

La tierra que escuchó mi primer llanto,
es la paleta tibia de cálidos trazos,
con la que un genio llamado Pablo,
expresaba la pasión que le provocaban sus encantos.

La tierra que escuchó mi primer llanto,
es esa dulce mocita que a los pies de Gibralfaro,
peina suspiros de desamores pasados,
soñando con el dia en el que pueda vestir de blanco.

La tierra que escuchó mi primer llanto,
es templada posada que abriga al visitante,
y son tales el candor y el arte que irradian su cobijo y su candela,
que a su pecho el forastero siempre regresa exultante.

La tierra que escuchó mi primer llanto,
me arropó una tórrida madrugada de estío,
y con La Manquita y el Gálvez por testigos,
me susurró una nana al oído con la que soñé,
que había nacido en la Ciudad del Paraíso.